Los ebanistas, a lo largo de los tiempos, han contribuido a que el alma de las hadas perdure en los muebles que crearon. El motivo es el amor que sienten por la madera y al realizar los muebles a mano esta esencia se ha conservado.
Ahora como se hacen los muebles en serie y estamos dejando de creer en estos seres mágicos, protectores de la naturaleza, esta entidad se desvanece.
De todos los muebles antiguos las sillas son las que tienen más proporción de "esencia de hada" y es porque han sido concebidas como sostén del cuerpo humano.
El respaldo de una silla corresponde a las "alas de una hada" y normalmente es la parte más ornamentada.
Mis sillas pintadas son "sillas hadas" y quien se siente en una se encontrará bajo la protección de una hada.